Ejercicio
Fue hace unas horas, salí a caminar, entonces la ví.
Mientras Iron Maiden perforaba mis tímpanos con "The Sign of the Cross" y mis espinillas estaban a punto de reventar, la ví: Alta, espigada, con su cabello liso y largo de color castaño claro recogido en una cola de caballo, iba debajo de una farola paseando a un pequeño Spitz Pomerania hiperactivo y malviajado (no me consta, pero estoy seguro de que algo se tragó, ningún bicho de su tamaño tiene esa mirada).
La ví y no supe si hablarle, sacarle una idiotez como preguntar la raza de su perro, fingir un calambre en ese mismo momento para alargarlo o tan solo mirarla. Elegí lo último, la miré y ví como la luz anaranjada se reflejaba en sus lentes, perfilaba su silueta contra el fondo nocturno hasta que nuestras miradas se cruzaron, entonces solo me dediqué a mirar al chucho infernal y alejarme con una expresión abstraída. "Quizá la vea mañana", pensé mientras le volteaba y la miraba por última vez, el perro se había cagado y ella se preparaba para recoger su gracia, una buena ciudadana, al fin.
"Quizá la vea mañana", pensé de nuevo, "Entonces le preguntaré la raza del animal" y así me retiré, reflexionando que podría ser diez años mayor que yo sin que eso me importara.
El útimo coro resonaba en mi cráneo...
The name of the rose...
a fire in the sky
The sign of the cross
Y mis espinillas otra vez me ardían al perder contacto con la grava, poco a poco me perdí en el camino de hace unas horas.
2 Declaraciones Indecorosas:
No se desde cuando te gustan las desportistas chic con pomerania y todo. BAH.
A falta de metaleras revoltosas con cuyo y todo, psss, ya ves tú.
Publicar un comentario
<< Home